Los Procesos Cognitivos


Los procesos cognitivos son todos aquellos eventos psicológicos que, en general, permiten la adquisición del conocimiento y el tratamiento de la información.
Pueden clasificarse en:
Procesos cognitivos básicos: eventos que están relacionados con la recepción, el registro y el almacenamiento de información.
a. Atención.
b. Percepción.
c. Memoria.
Procesos cognitivos superiores: eventos relacionados con el uso de la información utilizando aquella que está previamente almacenada.
a. El Pensamiento
b. EL Lenguaje.

LA ATENCIÓN
Puede definirse como un proceso de selección de información o como un recurso energético a distribuir en las diferentes operaciones, según se trate de recibir información o de ejecutar tareas.

LA PERCEPCIÓN
Así como en el caso de la atención, para la percepción pueden ofrecerse también dos definiciones:
La percepción es el proceso cognitivo que permite:
a. La interpretación de la información.
b. El reconocimiento de patrones.
En la primera definición se da por establecido que en los procesos perceptivos no son los estímulos del ambiente los que imponen al receptor, sino que éste pone lo suyo al percibir dando significado a los estímulos a que se enfrenta.
En la segunda definición lo que se da por establecido es que nuestra experiencia nos va aportando un caudal de patrones que se van almacenando en la memoria de largo plazo: patrones visuales (colores, formas, tamaños,…), auditivos el sonido de una ambulancia, de un patrullero; el sonido de una guitarra,…) y a sí para distintas modalidades perceptivas.

LA MEMORIA
Según el enfoque estructural la memoria puede definirse como:
La memoria es un proceso psicológico esencial para la adquisición, conservación y recuperación de la información; en su funcionamiento se identifican tres estructuras: memoria sensorial, memoria de corto plazo y memoria de largo plazo.
En las memorias mencionadas hay dos eventos: el almacenamiento y la recuperación de la información. En este texto sólo presentaremos la información relacionada a las memorias de corto y largo plazo.

EL PENSAMIENTO
El pensamiento permite el manejo, transformación y uso funcional del conocimiento que se aprende, para superar las dificultades que se encuentran en el entorno. Pensar implica un conjunto de habilidades (Beltran; 1998), que permite interactuar mentalmente y en el plano de las ideas.
Algunas habilidades que permiten aprender conocimientos, transformarlos y utilizarlos son: observar, identificar, establecer secuencias, comparar, clasificar, identificar relaciones causa-efecto, inferir información de textos y analizar

EL LENGUAJE
Cuando aprendemos, especialmente en el marco del aprendizaje significativo se requiere del lenguaje, pues cuando interactúan maestros y estudiantes, comparten significados a partir del intercambio de ideas expresados en palabras, conceptos, modelos o representaciones.
El estudiante pone en evidencia su capacidad para dar explicaciones haciendo uso de sus propias palabras, dotadas de un significado que pueden entender los demás. Así, cuando un estudiante explica porqué ocurren los deshielos en nuestro planeta, lo hace expresando sus ideas mediante el lenguaje verbal.